Es importante que no olvidemos, cuando vayamos a depositar nuestro voto en las próximas elecciones municipales,  la promesa de este enano moral  para ganar la alcaldía de Madrid: “Con Almeida Madrid Central se acaba el 26 de mayo”.  Pero como todos los vendidos al globalismo y a su hiperpublicitada Agenda 2030 nada más asumir al cargo le mandaron a cambiar de sexo ideológico y donde dijo “Almeida” pasó a decir “Carmeida” y donde dijo “acaba” pasó a decir “amplía”. Y lo más grave, como ocurre siempre con sus destacados compañeros de partido- Feijóo o Ayuso, por ejemplo-, es que se le nota muy cómodo y feliz en su nuevo rol de peón globalista. ¿Será porque lo han recompensado muy bien o porque esa habilidad para la mentira ya se la habían inyectado desde los tiempos de Rajao I del PP? Bueno, ambas cosas son perfectamente compatibles dado lo que vemos día a día.