Leyendo las delirantes ensoñaciones de algunos notables “periodistas”, en desprestigio altos como torres, que escriben en medios tan ampliamente seguidos como El País, uno, sin rubor, temor ni pereza algu
na, se anima a tirarse a la piscina, que parece que la fiesta es gratis y todo el monte es orégano en el asunto estrella. Me refiero a las interpretaciones de por qué razón Xabi Alonso se ha terminado yendo a freír espárragos a Alemania.
En estos días uno ha leído de todo al respecto. Se lleva la palma la rocambolesca idea de que Alonso ha pergeñado una inteligente maniobra en virtud de la cual se estaría asegurando ¡un puesto de entrenador en el Real Madrid en un futuro próximo!, de forma que, en primer lugar, habría dado gusto a Florentino Pérez –que no lo querría ni ver por el Bernabéu– multiplicándose por cero yéndose al Bayern y, en segundo lugar, haciéndolo limpia y caballerosamente, es decir, descargando al club de la responsabilidad por tal decisión, presentándolo como una cuestión puramente personal para aterrizar finalmente en Ca’ Pepa con el objeto de aprender el oficio de alquimista bebiendo directamente de las fuentes de la sabiduría suprema.
Otros parece que se empeñan en desprestigiar la figura del futbolista poniendo en tela de juicio el madridismo que supuestamente le adorna(ba), como si el muchacho se hubiese pasado cinco años reivindicándose en semejante culto. A ver si nos enteramos que eso del madridismo, o cualquier otro ismo asociado al mundo del fútbol, es una entelequia para engañar incautos. Que no, hombre, que no; que no son madridistas, que son profesionales francamente preocupados por defender sus propios intereses, como todo hijo de vecino. Y este vecino en concreto, precisamente, se ha caracterizado por su profesionalidad, su discreción y su trayectoria rectilínea, sin alharacas ni poses apestosas como otros, canteranos incluidos. Llegó con frialdad, hizo su trabajo, y cuando ha considerado que lo da por terminado, ha hecho su petate y se ha largado por donde vino. Ojalá todos fueran iguales, que si así fuera no harían falta gladiadores. Se mantuvo en una posición discreta en la movida con el portugués diabólico, apreciando, porque el chico no es tonto y está bien amueblado, dónde descansaba el detritus del vestuario (básicamente en las toperas, como es sabido) pero manteniendo esa frialdad metálica y elegante, Armani incluido, que le ha caracterizado en sus cinco años en Madrid, pero –ojo, diferenciemos– no como el gladiador, to sudao, oliendo, y de arena hasta la barbilla, que se pegaba hasta con el que picaba las entradas. Así se comportó Alonso: recto, barbilla alta, elegante, comedido, práctico. Y helador. ¿Algo que reprochar?
Pues sí, algo. Pero no a Alonso. Ni siquiera al Del Escroto, otro que también se pira, aunque lo que diferencia a uno de otro es que al primero no se le conoce tacha en su trayectoria como jugador madridista y al segundo, que se ha ido en busca de un fajo de billetes, unas cuantas. Al Del Escroto, el chantajista, según ya se dijo, lo tendrían que haber botado hace un buen rato, pero nunca es tarde si la dicha es buena. Ya ven, Florentino, que es al que sí se le puede reprochar no algo sino mucho, sólo acierta de carambola y tarde. Porque Florentino tendría que explicar a todo el madridismo hasta qué punto ve él relación entre el dúo sacapuntas dando al mismísimo presidente el ultimátum hace dos temporadas –que ya tiene delito, amigos–, el espectacular estado de permanente bajada de pantalones de nuestro particular angelito de la nada, la titularidad estrambótica del topo de la mierda antes aludida y la espantá del amigo Alonso. No sé, no sé, pero para mí que ahí hay un hilo de continuidad, aunque no sabría cómo explicarlo. Dejémoslo en manos de Pérez, a ver si se anima. Igual hasta nos cuenta cuándo va a convertir al gladiador en hombre bala para sacarlo del campo por encima del cuarto anfiteatro, culminando de esta manera la limpieza de lo queda de mourinhismo.
Maldita, embriagadora décima.
Me he equivocado, Dan. Florentino demuestra una vez más que está por encima de todos: Chicharito y a vender camisetas en México... que ya en Colombia tenemos a James. ¡Qué nivel!.
Vamos a subir un escalón más en Forbes. ¿Y la Liga, me dirás? Nada hombre, eso es secundario.
Santa Madre de Dios. El Floripondio se nos trae al paquete Chicharito del Manu. El Madrid ha perdido la cabeza.
¿Chicharito? ¿Falcao? ¿Negredo? ¿Soldado? Me imagino al Ser Superior partiéndose de risa. Lo tiene todo calculado, supongo que hasta este comentario mio. ¡Qué tío! Yo apuesto, viendo su trayectoria, que traerá al mejor. Y cuando digo el mejor me refiero, por supuesto, a los parámetros de marketing. O sea, vendrá Falcao.
Vamos a ver con qué se aparece el Jefe de Tragalotti (fernando_poo dixit) el último día de fichajes. Supongo que será Falcao, que se ajusta mucho al objetivo de Floren de conquistar totalmente el mercado de ventas de camisetas en Colombia.
Está claro, creo ya, para casi todos que volvemos al primer Florentino. Hay que ver cómo se le caía la baba por CR7 en la reciente ceremonia de la UEFA.
Espero que James aproveche bien la ausencia de Ronaldo y demuestre que podemos jugar muy bien sin el portugués. La duda es si el Topor lo va a sacar de titular o preferirá a su compañero de la selección del Marqués del Nabo Mentiroso, Isco.
Ahora resulta que Ancelotti dice que Alonso les ha cogido por sorpresa. Alonso dice que hace quince días anda con este tema. Alguien miente o Ancelotti se sorprende muy fácilmente.
Por otro lado, dice el entrenador que le comprende porque es por motivación, diferenciando de otras razones, como dinero (Di María) o competencia (Ozil). Cómo sabe Ancelotti que lo de Alonso es por motivación es un enigma. Y si realmente se lo cree, quizás debería preguntarse por qué un jugador que es una institución en el club está desmotivado cuando se acaba de ganar una CHL y, presumiblemente, se abriría una época de títulos y éxitos. El blogger creo que apunta con tino hacia un hartazgo de un estilo de hacer las cosas que a un tío serio como Alonso no le va. Yo, viendo la clamorosa injusticia de tener a Casillas de portero y un entrenador que lo permite, creo que haría lo mismo.
En cualquier caso, todo esto da mucho que pensar, y el club debería reflexionar sobre la línea que ha tomado. Mi pinión es que esto va a terminar mal también deportivamente.
El problema para opinar del mundo del fútbol es que como todo "profesional" de la cosa da la visión parcial que más le interesa e incluso mienten sin tapujos,e informarse de otra forma es prácticamente imposible, es muy difícil anticipar qué es lo que está pasando e imposible adivinar el futuro próximo.
Nuestros análisis casi siempre tienen que ir por detrás de los acontecimientos que son los únicos que no mienten. Del análisis de los hechos se deduce que tiene toda la pinta que tras la Décima, Florentino ha relajado sus esfínteres totalmente y ha vuelto por donde solía, Zidanes y Pavones pero sin Pavones, y ha dejado que se destruya cualquier resto del mourinhismo, especialmente las cosas buenas que tenía.
El papelón de Tragalotti es apoteósico. Un entrenador que consiente que le fichen y le quiten jugadores. Como si fuera un Marqués del Nabo Rencoroso (MNR) cualquiera. ¿De verdad los millones le compensan el desangrado de prestigio que va a sufrir? Se me hace imposible pensar algo parecido en Mourinho, ni siquiera en Guardiola.
Saludos
Este artículo viene a repartir justicia entre tanta inmundicia que se lee por la canallesca (anti)deportiva. Como bien se apunta, se quiere desviar la atención del respetable madridista con elucubraciones diversas. Incluso algunos, en un ejercicio compepollista first class, quieren señalar a Xabi Alonso como mal madridista que se va por el "mardito parné".
¿Por qué no imaginar que un tio que se viste por los pies no puede aceptar el emierdamiento del vestuario gobernado por el topo?.
De todo esto, como bien señala bg_rules en el artículo, el último y principal responsable es el presidente, fjojentimo pérez (Carletto pinta menos en esta historia que el 2 de copas en el tute).
Totalmente de acuerdo Bg_rules con lo que manifiestas. El presidente hace ya algún tiempo, que junto con los que se reunieron a cenar el martes pasado, están moviendo el vestuario y alineaciones a su antojo y esto se ve venir, que tarde o temprano, estas alianzas, nunca salen bien y terminamos estrellándonos todos. Como decíamos varios de los asiduos de este blog, cuanto daño nos va hacer la décima al madridismo.
El comentario de Cristiano Ronaldo sobre Mourinho, que aparece en Marca, deja claro, una vez más, que fue el triunvirato Topo-Ramos-CR7 el que conspiró para que se fuera. Esos serán los que marcarán ahora, con la aprobación de abuelo blando del Presidente, la línea del equipo. Alonso lo ha visto claro y ha salido pitando. ¿Qué harán Arbeloa y Varane? ¿Tendrán tiempo u oportunidad para escapar del Toporato que se les viene encima?
Excelente entrada con una valoración muy justa - y ajustada- de Xabi Alonso. Ojalá tuviésemos más jugadores con el perfil profesional y la cabeza de Alonso y menos Casillas, Ramos, Pepes y, si me apuran, CR7s.
Coincido también en la suposición que la salida inesperada de Alonso tiene más que ver con la titularidad del decrépito Topo y su aumento de poder en el vestuario ( en asociación con el "Cavaliere" de Camas y el Diós de Portugal). Da la impresión que Ancelotti pinta muy poco o nada. Vamos a ver cómo termina esta temporada ( si la termina) el Alvaro el Gladiator.